¿Es bueno el ciclismo para el cartílago de la rodilla?
Al ser una forma de ejercicio de bajo impacto, puede ser beneficiosa para mejorar la amplitud de movimiento sin ejercer demasiada presión sobre las articulaciones. El ciclismo también es ideal para fortalecer los músculos y mejorar la salud cardiovascular.
Puede que decida invertir en una bicicleta eléctrica, ya que ofrece pedaleo asistido por batería, o quizá le convenga más una bicicleta reclinada, ya que no está sentado en posición vertical mientras hace ejercicio. Esto quita peso a las articulaciones de las muñecas y las rodillas y puede ser útil si le resulta difícil agarrarse con las manos. También puede ser una opción más segura si tienes problemas de equilibrio.
Puedes comprar una bicicleta nueva o de segunda mano, y en tu tienda de bicicletas te aconsejarán sobre la que mejor se adapta a tus necesidades. También podrán aconsejarte sobre otros equipos que podrían ayudarte, como guantes acolchados para apoyar las muñecas. Además, pueden comprobar que la bicicleta está correctamente configurada para ti, por ejemplo, la posición del sillín.
Si practicas ciclismo al aire libre, es muy importante que lleves un casco que te siente bien. La mayoría de las tiendas de ciclismo venden cascos adecuados, y conviene asegurarse de que están homologados por la Normativa Nacional de Ciclismo.
¿El ciclismo es bueno para la salud?
¿Le gusta montar en bicicleta, pero teme su impacto en las rodillas? Para empezar, debe saber que el ciclismo es una actividad de bajo impacto y ejerce menos presión sobre las articulaciones que otras formas de ejercicio. Además, puede mejorar la amplitud de movimiento y reducir el dolor articular (vía Hospital Médico Mundial). Esta actividad divertida pero estimulante puede mejorar la flexibilidad de las articulaciones, la función muscular e incluso la salud del corazón, además de mejorar la forma física general.
El inconveniente de montar en bicicleta es el movimiento repetitivo de las piernas, que puede provocar lesiones por uso excesivo, incluido el desgaste de la articulación de la rodilla. “El ciclismo es un deporte muy repetitivo, con una media de 5.000 pedaladas por hora”, señala The Body Mechanic, un centro de fisioterapia con sede en Australia. Con el tiempo, el ciclismo prolongado puede causar cuádriceps e isquiotibiales tensos, lo que puede restringir el rango de movimiento alrededor de la rodilla y aumentar aún más el riesgo de lesiones.
Un estudio de 2017 publicado en el Journal of Community and Family Medicine encontró que alrededor del 27% de los ciclistas aficionados y el 16% de los ciclistas profesionales experimentaron dolor de rodilla de leve a moderado. Sorprendentemente, sus síntomas tenían menos que ver con el tiempo en el sillín o la distancia recorrida que con otros factores.
¿El ciclismo es bueno para las rodillas valgas?
De hecho, debería: El ciclismo es un gran ejercicio cardiovascular, dice Lauren Shroyer, MS, director senior de desarrollo de productos en el Consejo Americano de Ejercicio. El ciclismo puede fortalecer el corazón y los pulmones, así como mejorar la función muscular.
Y los estudios demuestran que el ciclismo puede ayudar a reducir los síntomas de la artritis: Un estudio publicado en el Journal of Rheumatology descubrió que tanto el entrenamiento en bicicleta como la natación reducían significativamente el dolor articular, la rigidez y las limitaciones físicas, y mejoraban la calidad de vida en adultos de mediana edad y mayores con osteoartritis (OA). Otro pequeño estudio descubrió que los pacientes con artritis reumatoide (AR) que hacían ejercicio en bicicletas estáticas con regularidad mejoraban su capacidad aeróbica y su tensión arterial y manifestaban menos sensibilidad articular.
Número uno: menos estrés articular. “El ciclismo es un ejercicio de bajo impacto”, dice Shroyer. Esto significa que el ciclismo limita el impacto sobre las articulaciones que soportan peso, como las caderas, las rodillas y los pies. Además, el movimiento ayuda a lubricar las articulaciones, lo que reduce el dolor y la rigidez. Otros beneficios del ciclismo son:
¿Es bueno el ciclismo para las rodillas artríticas?
Si padece osteoartritis (OA), es posible que piense que no puede practicar ciclismo al aire libre. Pero no es así. De hecho, el ciclismo es una gran opción porque es una actividad de bajo impacto con una gran recompensa.
Los datos lo corroboran: Un estudio publicado en el Journal of Rheumatology descubrió que montar en bicicleta reducía significativamente el dolor y la rigidez articular y mejoraba la fuerza muscular en adultos de mediana edad y mayores con artrosis.
Montar en bicicleta al aire libre, en lugar de en una bicicleta estática, ofrece ventajas significativas. En primer lugar, en lugar de fijarse en lo duro que está trabajando su cuerpo, se centra en respirar aire fresco, sentir la luz del sol y disfrutar de las vistas. Otros beneficios físicos de la bicicleta para las personas con artrosis son:
Aumenta las hormonas de la felicidad. El ejercicio aumenta la producción de endorfinas, hormonas fabricadas en el cerebro que no sólo nos ayudan a relajarnos y sentirnos bien, sino que también actúan como analgésicos naturales para el organismo.
Mantiene el peso bajo control. Los kilos de más pueden aumentar la presión sobre las articulaciones de la cadera, la rodilla y el tobillo, lo que puede empeorar la osteoartritis. “Cada cinco libras de peso corporal pueden añadir hasta 25 libras de presión adicional sobre las articulaciones de la rodilla”, dice el Dr. Sgrignoli. “Así que incluso una pequeña disminución de peso puede suponer una gran diferencia”. El ciclismo ayuda a quemar calorías durante el recorrido y aumenta la masa muscular, por lo que seguirás quemando más calorías incluso después de terminar tu sesión de ciclismo.